Fomente en su empresa el pensamiento transfronterizo y multidimensional en contextos, en interrelaciones complejas, en relaciones causa-efecto, en contradicciones y en paradojas. Intente integrar los temas con un horizonte de impacto a medio plazo en la actividad operativa. Establezca estos diálogos en un proceso de comunicación conectable en el que se capten las tendencias vinculadas al contenido, se cuestionen los límites del propio impacto, se introduzcan novedades en el desarrollo de la empresa y se revise y ajuste continuamente el camino.
El intercambio de expertos de diferentes disciplinas sobre temas de futuro (conversación estratégica) hace posible la vinculación de los hallazgos individuales y puede conducir a una mentalidad coherente de descriptores para el futuro, que también incluye posibles acontecimientos disruptivos, los llamados comodines. Estos comodines pueden ser, por ejemplo, los saltos tecnológicos, las (des)regulaciones gubernamentales, los ataques terroristas o las epidemias. La idea básica aquí es que el capital intelectual aumenta cuando se comparte, ya que los nuevos conocimientos importantes se forman precisamente en las interfaces entre instancias, es decir, en las relaciones transfronterizas entre expertos, equipos y organizaciones. Las interfaces pueden ser, por ejemplo, fronteras entre departamentos, fronteras de la empresa, fronteras del sector o fronteras regionales.
Discuta direcciones alternativas de desarrollo en su equipo, identifique opciones estratégicas de acción y evalúe las consecuencias de las posibles acciones. Una «mirada sistemática al futuro» basada en el análisis tiene un alto valor de utilidad. Describa los «espacios futuros» con las manifestaciones probables y coherentes de los principales factores de influencia y las tendencias y posibilidades en los escenarios. De este modo, se obtienen contextos vívidos y coherentes para las estrategias adecuadas, para la identificación de nuevos mercados y nuevos alcances, y para el desarrollo dirigido y creativo de futuros productos y servicios.
El intercambio constructivo de experiencias entre expertos de diferentes campos e, idealmente, también de diferentes sectores sobre temas futuros, también puede allanar el camino para interesantes cooperaciones de investigación, producción y comercialización en beneficio de todos los implicados. Por lo tanto, incluya conscientemente a clientes y proveedores seleccionados, e incluso a personas ajenas al sector, en sus diálogos estratégicos. Las iniciativas de previsión pueden abrir las puertas a atractivas redes empresariales.
Asegúrese de que los resultados a los que llegue en su diálogo de previsión fluyan en sus modelos de negocio y en el desarrollo de su estrategia. Esta derivación puede estar bien respaldada por un proceso de pensamiento de diseño.